Residentes de Alberto Ravell específicamente en la calle 30 Bl de Maturín, denuncian los malos olores y la proliferación de enfermedades causadas por el desbordamiento de las cloacas en su comunidad. Según los vecinos, este problema persiste desde hace cinco, a pesar de haber solicitado en reiteradas ocasiones la intervención de las autoridades competentes.
Un residente afectado, quien prefirió mantenerse en el anonimato, señaló que cada vez que llueve la situación se complica ya que las aguas servidas corren por toda la calle y además resalto que el agua ha dañado el asfalto a lo largo de los años dejando enormes huecos.
«No podemos ni salir a fuera de nuestras casa a pasar un rato ya que los malos olores son cada vez más insoportables, y también se suma la falta de iluminación en las calles, lo que ha generado situaciones de inseguridad durante las noches», destacaron los vecinos.
Ante esta situación, los vecinos hacen un llamado urgente a las autoridades pertinentes para que tomen medidas inmediatas y resuelvan estos problemas que afectan la calidad de vida en el sector Alberto Ravell.
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