El Gobierno de Venezuela manifestó este lunes su firme rechazo ante el reciente anuncio de los Estados Unidos sobre la venta de armamento a gran escala a Taiwán. A través de un comunicado difundido por la Cancillería, el Ejecutivo venezolano calificó esta medida como un acto de injerencia en los asuntos internos de la República Popular China.
Violación de compromisos internacionales
Para la diplomacia venezolana, la venta de equipos militares representa una «violación flagrante de los compromisos internacionales asumidos por Washington».
El documento oficial advierte que este tipo de acciones no solo atentan contra la soberanía e integridad territorial de Beijing, sino que también generan una desestabilización en la geopolítica global.
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«Tal acción atenta directamente contra la soberanía de China, socava la estabilidad estratégica y representa una descarada amenaza que pone en riesgo la paz y la seguridad en la región Asia-Pacífico», reza parte del comunicado emitido por el Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores.
Adhesión al principio de «Una Sola China»
Venezuela aprovechó el pronunciamiento para ratificar su posición histórica en política exterior, reiterando su estricta adhesión al principio de «Una Sola China». En este sentido, el Gobierno venezolano reafirmó que reconoce a Taiwán como una parte inalienable del territorio de la República Popular China.
Con esta declaración, Venezuela se alinea una vez más con sus aliados estratégicos en el continente asiático, instando al respeto de los acuerdos internacionales y a la preservación del equilibrio de seguridad en la región.
Con información de Noticias Venevisión
