
La prolongación Rómulo Gallegos está gravemente afectada y las lluvias empeora la situación
Llegaron las lluvias y el deseo que termine el periodo está latente en los choferes de la ruta 58, en el tramo vial de Los Tapiales-4 de febrero, comunidades perteneciente a la parroquia Las Cocuizas.
Durante el recorrido por la llamada prolongación Rómulo Gallegos se constató el gran deterioro que posee, especialmente entre La Florecita y La Juventud.

El día era lluvioso y el agua caída se estancó y se volvió lodo. Este acontecimiento produce en los conductores de esta importante ruta una severa preocupación, ya que está en riesgo el vehículo, que tanto cuesta mantenerlo rodando.
«Son 40 conductores afiliados en esta ruta y que se ven afectados por el mal estado de la vialidad. Ya hemos solicitado la reparación de la misma, pero aún no tenemos respuestas definitivas», subrayó Teresa Salazar, fiscal de la ruta.
Refieren que los consejos comunales de los sectores afectados han realizado todo los trámites para la reparación de la vía, pero aún no ven materializado la gestión.
«Queríamos que los trabajos lo hicieran ante de la llegada de las lluvias, pero no se logró nada. Como podrás observar esto está grave», indicó Salazar.
La ruta de transporte tiene que cumplirse hasta la escuela de 4 de febrero «a veces se nos dificulta cumplir el recorrido, porque cuando llueve los choferes no quieren tomar el riesgo que dañar las piezas de su vehículo».
Ayuda de la comunidad
Los choferes interesados en cumplir su ruta optan darles una colaboración a los mismos vecinos para que rellenen los grandes huecos «así podemos trabajar, con el apoyo de las comunidades. Pero con las lluvias se hace difícil, porque el relleno cede», refieren los conductores.

El deterioro de esta vialidad ya suma más de cinco años y según los vecinos y transportistas «siempre hay un espérate» y el tiempo no da tregua y con él la afectación va en aumento.
«En la entrada del sector 4 de febrero y en la escuela, también hay un tramo dañado. Llegábamos hasta el preescolar, pero también está dañada esta vía. Hemos planteado en diversas reuniones, junto con el consejo comunal y no nos han parado», indicó un chofer, quien prefirió el anonimato.
La esperanza que resuelvan esta problemática no se pierde y el deseo de que el gobernador Ernesto Luna o la alcaldesa Ana Fuentes, visite la zona está ferviente.
Fotos: Osmel Rodríguez