Samuel David Sandrea es un tierno niño venezolano de solo seis años que acaparó los titulares de la prensa nacional desde este viernes 13 de septiembre, día en el que murió ahogado en una piscina durante una excursión escolar en Colombia.
De manera extraoficial se conoció que el pequeño nació en Cabimas, estado Zulia, y migró junto a sus padres al país vecino cuando solo era un bebé. Residenciado en Cundinamarca, estudiaba en el Colegio San Rafael, el cual, organizó la actividad en un centro recreacional junto a varios maestros.
Según Blu Radio, el niño estaba en Centro Recreacional Club El Bosque, del municipio de Silvania de Cundinamarca desde las horas de la mañana junto a sus otros compañeros de la misma edad.
Phillip Espejo Silva, coordinador del colegio, relató a la emisora de radio colombiana que alrededor de las 2:00 de la tarde, mientras los niños almorzaban, notó que Samuel no estaba en el restaurante. Al parecer, en un descuido de sus maestros, se escabulló y se lanzó a la piscina.
Al percatarse, se dio cuenta de que, en efecto, el pequeño se había escapado a la piscina, pero estaba ahogándose. Inmediatamente pidió auxilio para ayudarlo.
El menor fue trasladado al Hospital Ismael Silva de Fusagasugá. Sin embargo, el personal médico señaló que el niño había llegado sin signos vitales.
Sobre el caso, las autoridades se encuentran investigando para esclarecer de manera urgente las circunstancias que llevaron a los hechos. El cuerpo del menor fue entregado a sus padres. Sin embargo, aún no se tiene un informe oficial de lo sucedido durante la excursión escolar.
A través de las redes sociales, el colegio San Rafael publicó un mensaje para despedir al pequeño acompañado por su fotografía: “No hay palabras suficientes para aliviar este inmenso dolor, nuestro corazón hecho trizas solo busca consuelo en el amor y en la misericordia de Dios”.
Vía | Versión Final
