La historia de Etta Ng Chok Lam, hija del icónico actor Jackie Chan, muestra una realidad lejos del lujo y éxito que rodea a su padre. A sus 26 años, la joven ha enfrentado el abandono, la pobreza e indigencia, así como el rechazo de su familia sin recibir el apoyo de sus progenitores.
Etta es el resultado de la relación extramatrimonial entre Chan y la modelo Elaine Ng Yi-Lei, ex Miss Asia 1990, con quien mantuvo un romance en secreto mientras estaba casado con la actriz taiwanesa Joan Lin. Este escándalo sacudió su carrera artística; obligado a asumir su error, nunca se hizo cargo de la criatura.
“Cometí un error que cualquier hombre en el mundo pudo haber cometido; la noticia de mi aventura, que acabó con el nacimiento de una niña, estalló como una bomba. Quería llamar a Joan, pero no sabía qué decirle. No iba a ser capaz de explicárselo”, dijo para aquel entonces.
En su momento, la estrella de la actuación declaró que haría su papel como padre, pero fue desmentido por Elaine, afirmando que crió a su hija sola. Chan nunca ofreció apoyo financiero ni buscó crear un vínculo con su retoño.
Una vida lejos del lujo
La vida de la hija no reconocida de Jackie Chan fue compleja, ya que creció en un entorno de abandono, lejos de la imagen de padre ejemplar que su progenitor proyectaba al mundo. Con los años, la joven tomó la decisión de hacer pública su difícil situación.
En 2018, compartió un video junto a su pareja, la influencer canadiense Andi Autumn, en el que revelaba que ambas vivían en la calle debido al rechazo de sus padres. “Soy hija de Jackie Chan y llevo un mes sin hogar por padres homofóbicos. Nadie nos ayuda”, expresó.
Lejos de recibir alguna ayuda, su madre minimizó la situación y culpó a Etta por no buscar trabajo. También acusó a Andi de ser una influencia negativa para su hija. Sin embargo, ambas contrajeron matrimonio poco después, aunque la joven continuó enfrentando dificultades y se la vio en refugios por su situación económica.
Jackie Chan nunca se pronunció públicamente sobre la compleja realidad de su hija, ni respondió a los señalamientos de abandono. Por su parte, la joven habló con dolor de la indiferencia de su progenitor, asegurando que nunca lo llamaría “papá”. En su autobiografía Never Grow Up, el actor evitó mencionar a su hija, centrándose en cómo la infidelidad afectó su matrimonio, dejándola de lado.
Vía Meridiano
