Un operativo de 5.000 bomberos lucha contra múltiples incendios forestales que amenazan zonas pobladas, incluyendo áreas cercanas a Patras, la tercera ciudad más poblada de Grecia y las islas turísticas de Quíos y Zante. Las llamas, avivadas por fuertes vientos y condiciones cálidas y secas, ya han destruido viviendas, granjas e instalaciones industriales, que han obligado a evacuar a miles de residentes y turistas.
Grecia enfrenta «una jornada muy difícil en su lucha contra varios incendios debido a las violentas ráfagas de viento», advirtió este miércoles 13 de agosto el portavoz de los bomberos, Vassilis Vathrakoyannis.
Desde la semana pasada, Grecia ha registrado vientos de más de 80 km/h y los incendios han dejado tres muertos desde el viernes, dos de ellos turistas vietnamitas. El servicio meteorológico nacional prevé que las temperaturas alcanzarán los 40 ºC este miércoles en ciertas regiones de Grecia occidental, en especial el oeste del Peloponeso.
Las autoridades se preocupan principalmente por los incendios en la isla de Zante, en el mar Jónico; en la isla de Chíos, en el mar Egeo; en la localidad occidental de Preveza; y en el departamento de Acaya, en el noroeste del Peloponeso, donde evacuaron una veintena de poblados el martes.
En la mañana del miércoles, 33 aviones y 4.850 bomberos están movilizados en todos los frentes, indicó Vathrakoyannis. «Son sin duda las 24 horas más difíciles de lucha contra el fuego», declaró el presidente de la Unión de Oficiales de Bomberos, Kostas Tsigas, a la televisión local ERT.
«Solo ayer se desataron 82 incendios, un número muy elevado que, combinado con los violentos vientos, la sequedad y las elevadas temperaturas, ha creado enormes dificultades», afirmó. Más de 200 hectáreas han sido destruidas por las llamas desde junio en Grecia.
Vía VTV
