El presidente de Colombia, Gustavo Petro, decretó un estado de emergencia económica por 30 días tras el hundimiento en el Congreso del proyecto de reforma tributaria que buscaba recaudar más de 16 billones de pesos para el presupuesto nacional de 2026.
La medida, contenida en el Decreto 1390 de 2025, otorga al Ejecutivo la facultad de establecer nuevos tributos o modificar los existentes, con el objetivo de garantizar la prestación de servicios públicos esenciales y enfrentar lo que calificó como una situación fiscal grave.
Petro defendió la decisión argumentando que el país mantiene un déficit primario desde gobiernos anteriores y que la negativa del Congreso a aprobar la reforma tributaria, sumada a la política monetaria del Banco de la República, ha incrementado el riesgo de insostenibilidad de la deuda.
El mandatario subrayó que los nuevos recursos deben provenir de los sectores más privilegiados de la economía: “los megarricos que han sido los beneficiarios de la política económica”.
La prensa hoy sigue en su afán de desinformar al pueblo de las acciones del gobierno
— Gustavo Petro (@petrogustavo) December 22, 2025
Nosotros no nos endeudamos para financiar gasto ni corriente ni de inversión del actual gobierno
Solo nos endeudamos para pagar la deuda de anteriores gobiernos, que en la caso de la deuda…
Contexto político y económico
La reforma tributaria rechazada era la tercera presentada por el Gobierno de Petro desde 2022. Mientras la primera fue aprobada meses después de su llegada a la Presidencia, las dos siguientes —en 2024 y 2025— fueron rechazadas por el Congreso.
El Ejecutivo sostiene que la falta de aprobación de estas iniciativas compromete la estabilidad fiscal del país y limita la capacidad de financiar programas sociales y de infraestructura.
Reacciones y advertencias
La oposición criticó la declaratoria de emergencia, acusando al Gobierno de derrochar recursos públicos y de recurrir a medidas excepcionales en lugar de reducir el gasto.
Petro, por su parte, advirtió que, si la Corte Constitucional decide tumbar el decreto, el riesgo país aumentará y la deuda se volverá insostenible, generando una crisis económica de mayor magnitud.
Vía Últimas Noticias
