Más de 330 familias que residen en el urbanismo Villas del Sur en Maturín se ven afectadas por el desbordamiento de aguas servidas, lo cual ha ocurrido durante los últimos seis años. Los vecinos afirman que este problema surge debido al robo de motores y cableado que paralizó la planta de tratamiento encargada del control de las aguas negras.
Este complejo habitacional, construido como parte del programa gubernamental Misión Vivienda, cuenta con tres calles cuyo sistema de drenaje se encuentra colapsado. Como resultado, los malos olores son constantes y hay una proliferación diaria de zancudos, mosquitos y diversas plagas.
«Ya llevamos seis años con esta situación», manifestó Odalys Farías, residente afectada. «Hemos reportado el problema a Aguas de Monagas mediante la aplicación Ven-app pero no hemos recibido soluciones hasta ahora. La planta está inoperativa porque nos han robado los motores y el cableado».
Farías también mencionó que los niños del sector no pueden jugar fuera debido a las aguas residuales presentes en las calles. Además, muchos menores han desarrollado hongos en sus pies así como fiebre, diarrea y malestares estomacales.
Por otro lado, Alejandro Hernández destacó que debido al colapso sanitario presente en su hogar cercano al llamado «bosque galería Morichal», dicho lugar presenta niveles significativos e indeseables contaminación ambiental.
En vista de esto último es que Hernández insta al gobernador Ernesto Luna para tomar medidas efectivas a través Hidrológica Aguas Monagas con mira a solventar este grave problema sanitario público. Los vecinos puntualizaron además sobre la falta generalizada alumbrado público; razón por la cual muchas casas tienen lámparas LED instaladas frente ellas o bien sujetadas directamente a postes cercanos.
