En el punto más famoso de la vida nocturna en Medellín quedó restringida desde el lunes 1 de marzo la demanda de servicios sexuales como parte de una estrategia de la alcaldía local para evitar la explotación sexual comercial infantil, luego de que fueran encontradas dos menores de edad junto a un extranjero en un hotel de la zona.
El pasado jueves, un ciudadano llamó a las autoridades para alertar sobre la presencia de dos menores de edad de 12 y 13 años en un hotel “en estado de indefensión”, acompañadas de un hombre de 36 años, según indicó el fin de semana la policía.
El alcalde de la ciudad, Federico Gutiérrez, advirtió que se trata de un presunto caso de explotación sexual infantil en el que estaría involucrado un estadounidense de 36 años que arribó días antes a Medellín proveniente de Fort Lauderdale, Florida.
“Yo quiero que el mundo entero sepa quién es este depravado”, indicó el mandatario el domingo a la prensa. “Que se sepa en Estados Unidos o en cualquier país, que alguien que crea que puede venir a nuestra ciudad a hacer lo que quiera con nuestros niños, niñas y adolescentes está muy equivocado”, agregó.
Las menores fueron remitidas a un centro médico para verificar su estado de salud y el hombre estuvo detenido por doce horas en un centro policial donde fue identificado y luego quedó en libertad. Según Gutiérrez, salió de Colombia el viernes en un vuelo con destino a Fort Lauderdale.
“Esta persona por más que haya logrado salir del país no crea que se salvó de este caso, es más, seguiremos avanzando, seguirán las pruebas técnicas y las entrevistas con las menores de edad”, detalló Gutiérrez.
La Fiscalía inició una investigación para recaudar pruebas que permitan establecer si el extranjero habría incurrido en conductas delictivas relacionadas con prácticas sexuales con menores de edad. Mientras que el hotel fue suspendido por 10 días.
Medellín recibió el año pasado 1,4 millones de turistas, una cifra récord. Un auge que también ha traído otros fenómenos como la explotación sexual a mujeres y menores, el consumo de drogas y turistas extranjeros que han muerto en extrañas circunstancias, algunos luego de contactar mujeres por plataformas digitales.
El secretario de Seguridad de la ciudad, Manuel Villa, explicó el lunes a la prensa en qué consiste la restricción. Pretenden perseguir a quien busque consumir servicios sexuales o a quienes los faciliten, como los establecimientos comerciales o proxenetas, a quienes se les aplicarán medidas correctivas, que pueden incluir multas económicas.
Mientras que a quienes ejerzan trabajo sexual, que no está penalizado ni tampoco regulado en Colombia, los abordarán para ofrecerles la oferta institucional que incluye atención psicosocial.
Los decretos no sólo suspenden la demanda o solicitud de servicios sexuales en los parques Lleras, El Poblado y la calle 10 —zonas donde se concentra la vida nocturna—, también limita la promoción de actividades comerciales o turísticas a través de folletos o plataformas tecnológicas que impliquen servicios sexuales o de connotación sexual.
El documento advierte que en esa zona operan cuatro estructuras de crimen organizado que, según actividades de inteligencia, se dedican al tráfico de estupefacientes y la extorsión a quienes ejercen la prostitución.
Esas estructuras estarían instrumentalizando a menores de edad para explotarlos sexualmente, como parte de un aumento en la criminalidad asociada a la “promoción exorbitante de prácticas delictivas como productos turísticos. Este es un fenómeno negativo que requiere medidas urgentes”, indica el decreto.
Cortesía NT.