En un maratónico encuentro de 13 entradas disputado en el Estadio Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto, Cardenales de Lara dejó en el terreno a Bravos de Margarita 7-6, para reducir los posibles rivales de Tiburones de La Guaira a sólo dos: Los pájaros rojos o Leones del Caracas.
El triunfo crepuscular, concretado por un elevado de sacrificio de Hernán Pérez, agotó las opciones de la tropa insular de avanzar a la Gran Final, uniéndose a Tigres de Aragua como los eliminados del Round Robin, aún por dos jornadas por efectuarse.
Lara mejoró su récord a 9-6, manteniendo el juego y medio de ventaja que tenía hasta antes del inicio del compromiso, frente a los melenudos, en el segundo lugar de la tabla de clasificación. El equipo de Henry Blanco aseguró, en el peor de los escenarios para sus intereses, disputar un juego extra contra los capitalinos, el cual sería en condición de home club para los larenses.
Sin embargo, bastará con que la bandada escarlata gane su último duelo de la fase, este sábado, de nuevo frente a los neoespartanos, para asegurar su boleto. Cardenales, también clasificará a la serie por el gallardete si los avileños pierden uno de los dos compromisos que les restan del calendario del Todos Contra Todos.
La victoria de los alados comenzó a definirse con un sencillo de Yojhan Quevedo como primer bateador de la parte baja del decimotercer inning frente a Henry Centeno, avanzando hasta la segunda base con un wild pitch del mismo lanzador. Ildemaro Vargas recibió base por bolas intencional, y Jecksson Flores ejecutó un efectivo toque de bola para mover a ambos corredores a posición de anotar.
Rangel Ravelo fue también enviado al primer cojín de forma automática para dejar la escena servida a Hernán Pérez, quien al primer lanzamiento que observó de Centeno dirigió un fly hacia el jardín derecho con la suficiente distancia para que Quevedo desatara la algarabía en el feudo barquisimetano.
Con información de Prensa LVBP