Un niño, de 10 años de edad, ingresó un arma de fuego a la institución educativa en la que estudia, ubicada en el municipio Carrizal, estado Miranda, para «resolver un problema con un amiguito».
El diario local El Tequeño reseñó que el hecho causó gran consternación entre la comunidad educativa del colegio, quienes pidieron que se realice una investigación.
“Esto habla muy mal de la base de la familia. Queremos respuestas para determinar las responsabilidades en este caso», expresó Giovanny Quintana, concejal del municipio Carrizal.
El diario web informó que el arma de fuego tenía municiones.
«No podemos permitir que hechos como este se repitan en nuestras escuelas. Es necesario tomar medidas contundentes para proteger a nuestros niños y niñas”, finalizó el concejal.
Cortesía El Nacional.
