Comerciantes y vendedores informales de comida de la calle Monagas en Maturín, se ven afectados por el desborde de cloacas en la vía. Aseguran que en el lugar no se hace mantenimiento desde hace más de un año.
Mencionaron que se sienten preocupados ya que estás aguas residuales pasa por debajo de sus puestos de ventas de comida.
«Esto ya tiene más de un año, nosotros tenemos que seguir trabajando y nos calamos los malos olores, pero es horrible trabajar en medio de aguas negras», comentó una vendedora del lugar.
En este sentido añadieron que debido a los malos olores han perdido clientes ya que es desagradable comer en un lugar donde huele a cloacas.
«No sabemos de dónde vienen esas aguas negras, nosotros no solo somos los afectados también lo son todas las personas que vienen a comprar en nuestros puestos y los que compran en los chinos», resaltó.
Fotos/Osmel Rodríguez
