Un nuevo grupo de 174 migrantes venezolanos provenientes de Honduras y que habían sido víctimas de secuestro en los Estados Unidos (EEUU), retornaron al país este miércoles en un vuelo directo de Conviasa como parte de la Gran Misión Plan Vuelta a la Patria.
Exactamente a las 4:45 de la tarde arribó el décimo cuarto vuelo de la aerolínea venezolana, con los connacionales que permanecían retenidos en territorio norteamericano. Se trata de 29 mujeres y 145 hombres que fueron repatriados desde el aeropuerto de Palmerola, en la ciudad de Comayagua en Honduras.
A través de la aerolínea estatal Conviasa, se acordó en coordinación con las autoridades hondureñas, el traslado seguro de los compatriotas, como parte de la política del Estado venezolano para proteger a sus ciudadanos, frente a las medidas ilegales, aporofóbicas y xenófobas impulsadas por el gobierno de Donald Trump.
Desde el pasado mes de febrero del presente año con la reanudación del Plan Vuelta a la Patria, un total de 2.731 connacionales regresaron al país, como parte del esfuerzo del Gobierno Bolivariano que lidera el presidente Nicolás Maduro Moros, a través del Plan humanitario Vuelta a la Patria, programa que no sólo facilita el retorno de ciudadanos venezolanos que se encuentran en el extranjero y desean volver al país, sino que ofrece asistencia económica, educativa y jurídica hacia la reintegración de los migrantes en la sociedad venezolana.
Proceso de atención médico integral
En relación al proceso de atención médico integral, los connacionales cumplieron con los procedimientos migratorios, recibiendo atención médica integral por parte del personal de la Cruz Roja venezolana.
Luego, cada migrante respondió las preguntas propias de la entrevista protocolar, donde se procedió a la revisión minuciosa de sus casos, para luego ser llevados a sus respectivos hogares, por parte de los organismos de seguridad.
Con esta nueva llegada, se reafirma la voluntad del Gobierno Revolucionario de defender los derechos humanos de su pueblo, sin importar las fronteras ni las presiones internacionales.
