Carmen Sánchez, residente del sector La Voluntad de Dios, ubicado en la parroquia La Cruz, del municipio Maturín, ha levantado la voz en nombre de 49 familias que se ven afectadas por la falta de servicios públicos en su comunidad.
Según Sánchez, la comunidad carece de postes de electricidad, asfaltado, sistemas de aguas negras y aguas blancas, lo que ha generado dificultades para los habitantes.
«Llevamos más 14 años de fundado, no tenemos agua y tenemos que agarrar en una toma improvisada que está en la entrada del sector y cuando no hay tenemos que ir al sector vecino Arismendi a buscar el vital líquido».
Además, resaltó que aunque la calle principal cuenta con un poco de iluminación gracias a los esfuerzos de los propios residentes, las calles secundarias permanecen a oscuras y en mal estado, llenas de maleza y sin pavimentar.
«Nosotros mismos hemos tenido que improvisar con la iluminación de las calles, ya que no recibimos ayuda de las autoridades gubernamentales y tampoco contamos con el tendido eléctrico. Nosotros hicimos unos con palos y tubos», agregó.
Por otra parte, los residentes mencionaron que ante la falta del servicio de aseo urbano se han visto en la necesidad de improvisar un vertedero para deshacerse de la basura, pero la situación ha generado proliferación de moscas, roedores, serpientes zancudos y mosquitos en la zona.
«Botamos la basura en un terreno que está solo, sin embargo, eso ha generado que salgan cucarachas, ratones y hasta serpientes, zancudos y mosquitos por la cantidad de monte», dijo.
Ante esta situación, los habitantes que han sido parte de La Voluntad de Dios durante más de 14 años, esperan ser atendidos con respecto a los servicios públicos.
Fotos/Osmel Rodríguez
