“Necesitamos que la justicia llegue a todos, que no haya corrupción en el Poder Judicial, que los jueces, magistrados, ministros, apliquen al pie de la letra el principio de que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie, que tengamos un verdadero Estado de Derecho. Ahora sí, es el pueblo el que manda, el que decide”.
Tales fueron las palabras pronunciadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al promulgar el domingo pasado la Reforma al Poder Judicial, una de sus últimas victorias legislativas, que ameritó el rechazo de numerosos integrantes del sector, quienes en las últimas semanas llegaron a protagonizar huelgas, manifestaciones y hasta un violento ingreso a las instalaciones del Congreso, cuando en el Senado se debatía su aprobación.
Mediante este novedoso e histórico instrumento legal, a partir del 2025 todos los magistrados de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), que se reducirían a nueve, los miembros del Tribunal de Disciplina Judicial, que sustituirá al Consejo de la Judicatura Federal y evaluará e investigará el desempeño de los jueces y casi la mitad de estos últimos (que suman 7.000), serán electos mediante votación popular. El resto será seleccionado en comicios pautados para 2027.
Falta ahora que se instrumenten las reformas necesarias planteadas por la ley, a fin de organizar ambas elecciones extraordinarias, con candidatos propuestos por el Poder Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial, según quedó establecido.
Revolución
El presidente del Senado mexicano, Gerardo Fernández Noroña, no tuvo dudas al categorizar la reforma: “Yo creo que es una revolución en el orden judicial”.
El parlamentario, quien asumió el máximo cargo de la Cámara alta el primero de este mes, recalcó la trascendencia que tiene este paso, “porque seremos el primer país en elegir a todas las personas juzgadoras. Es un nuevo camino para México y para la humanidad, pues genera condiciones para que otros países lo hagan”.
Fernández Noroña, quien es además sociólogo, destaca que “en el Poder Judicial se mantiene el último reducto del conservadurismo, pues está integrado por la parte más conservadora del sistema político y el pueblo no tiene acceso a esa instancia, que es permanente, inamovible, impune, con condiciones bajo la mascarada de que son gente muy especializada, de que el derecho no tiene posición política, cuando evidentemente detrás hay posiciones muy retrógradas y que además desde ahí se ha impulsado la figura del ‘lawfare’, el golpe de Estado en nombre de la ley”.
“Es un paso importantísimo tanto en México como en otros países, pues el Poder Judicial se dedicó a obstruir el desarrollo del proceso que encabeza nuestro movimiento (el partido oficialista Morena, que seguirá en el gobierno con Claudia Sheinbaum) y fue tomando cada vez de manera más evidente decisiones políticas disfrazadas de jurídicas, encaminadas a descarrilar nuestro proceso”, recalca el senador.
Antecedentes
Fernández Noroña incluso habla de antecedentes importantes en su país:
“En México eso ya ha sucedido en el siglo XIX, ciertamente que era un voto indirecto y se eligieron a los más grandes juristas que ha tenido la patria y que su talla no ha sido alcanzada por nadie, como el propio Benito Juárez, que después fue presidente de la República; el nigromante Ignacio Ramírez, un gigante de la política de los liberales de ese siglo; José María Iglesias, el propio expresidente de la República Sebastián Lerdo de Tejada, solo por citar algunos ejemplos. Entonces México es el primer país del mundo que elegirá a todas las personas juzgadoras”, subraya.
En octubre. Frenando intenciones de contraponerla con López Obrador, la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, recalcó que “en octubre (tomará posesión el 1°) ya inicia el proceso de renovación del Poder Judicial, porque así dice la reforma constitucional”.
Evo Morales dio el primer paso en Bolivia en 2011
Durante el gobierno de Evo Morales, en 2011 Bolivia se convirtió en el primer país del mundo en elegir por votación popular a los jueces y magistrados, con el fin de iniciar un proceso de democratización de la justicia y terminar con la influencia de las élites.
En términos generales, el mismo principio bajo el cual se produjo la reforma del Poder Judicial en México.
En ese país, la Asamblea Legislativa Plurinacional propone listas de candidatos al Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal Constitucional, Consejo de la Magistratura y Tribunal Agroambiental, por méritos y experiencia, que posteriormente son sometidos a la votación popular.
El objetivo, como en México ahora, fue y sigue siendo la democratización de la justicia, permitiendo a los bolivianos tomar decisiones directas eligiendo a quienes integran ese poder en determinadas instancias.
Al igual que lo ha subrayado el presidente Andrés Manuel López Obrador, en este Estado plurinacional la intención fue combatir la corrupción y la imposición de las élites.
En Estados Unidos, los integrantes del Tribunal Supremo son designados por el presidente de la República y confirmados por la Cámara del Senado. Algunos jueces estadales y magistrados sí son electos por votación popular, pero luego de ser postulados por las respectivas comisiones judiciales.
En algunos cantones (estados independientes) de Suiza, también es usada esta modalidad.
Presidente del Senado: “Es un regalo para el pueblo”
El presidente de la Cámara del Senado de México, Gerardo Fernández Noroña, recalcó sobre la reforma que “los medios decían que era un regalo para el presidente López Obrador. No, es un regalo para el pueblo de México, que no ha tenido justicia, que ha vivido siempre la experiencia de acercarse al Poder Judicial que es una trituradora de carne, cuyas sentencias favorecen al poder económico, a quien tiene más dinero y no a quien está pidiendo justicia”.
Y añade otro dato histórico: “Es un viejo sueño desde (el sacerdote José María) Morelos (prócer llamado Siervo de la Nación) que en 1812 estableció que debían existir tribunales que trataran por igual al más humilde y al más encumbrado y ha sido una expectativa no cumplida hasta la fecha. Esperamos que esta decisión que hemos tomado convierta a las personas juzgadoras en verdaderos servidores del pueblo”.
Recuerda que “el compañero López Obrador envió este paquete de iniciativas de las cuales 17 fueron aprobadas en la Cámara de Diputados que terminó sus funciones el último día de agosto en comisiones. La primera aprobada en el pleno ha sido esta reforma constitucional del Poder Judicial y hay 16 más que ser irán aprobando en esta nueva legislatura”.
Vía Últimas Noticias.
