El hombre se encontraba en la puerta del negocio cuando, repentinamente, dos sujetos llegaron hasta el lugar y comenzaron a disparar en su contra.
Sin mediar palabras, uno de los agresores le disparó repetidamente hasta vaciar el cargador de su arma.
Tras cometer el sangriento crimen, los presuntos sicarios huyeron rápidamente en su motocicleta, con dirección hacia la Panamericana Norte. El cuerpo del venezolano quedó tendido sobre el suelo.
Las autoridades locales se trasladaron hasta el lugar del crimen para recoger el cadáver y comenzar las investigaciones.
Los peritos de criminalística recolectaron 15 casquillos de bala como evidencia, reseña el medio Panamericana.
Cortesía 2001.
