
Desde hace más de una semana se registra un desborde de aguas servidas en la cercanía de la redoma de La Floresta que causa malestar en conductores y peatones.
Uno pasa en carro por esa zona y los malos olores son insoportables; eso además está rompiendo el pavimento y los carros son los que resultan afectados por el deterioro de la vía. «Se dañan los cauchos, los amortiguadores o el tren delantero», concuerdan los conductores.
«Ese bote de aguas negras tiene más de una semana y la hediondez no se aguanta cuando uno pasa por ahí. La vía ya se está deteriorando y el llamado es para Aguas de Monagas para que reparen esa cloaca desbordada», manifestó Pedro Delgado, quien diariamente circula por el lugar.
Un trabajador de un centro comercial adyacente, que prefirió no identificarse, indicó que los malos olores generan una situación de insalubridad que puede ser causante de enfermedades.

Fotos: Osmel Rodríguez