Cuatro ciudadanos venezolanos fueron encontrados muertos en su residencia en el municipio de Facatativá, en el centro de Colombia, en un hecho que actualmente se encuentra bajo investigación. La principal hipótesis apunta a una posible intoxicación por inhalación de gas propano.
El gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, informó que los fallecidos eran jóvenes, con edades comprendidas entre 20 y 30 años, y que la situación podría haberse producido mientras dormían tras consumir alcohol. “Por alguna razón la estufa permanecía encendida”, señaló el mandatario.
Las autoridades realizaron el levantamiento de los cuerpos, y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía inspeccionó el lugar y trasladó los cadáveres a Medicina Legal, donde se aplicarán las pruebas pertinentes para determinar con precisión la causa de la muerte.
El alcalde de Facatativá, Luis Carlos Casas, explicó que las víctimas residían en un inmueble arrendado en una zona habitada principalmente por migrantes y trabajadores agrícolas. La tragedia fue descubierta después de que los familiares, preocupados por la falta de contacto desde el domingo, ingresaran a la vivienda la noche del 23 de diciembre.
Al entrar, los familiares cerraron la válvula de la pipeta de gas en la cocina y recorrieron las habitaciones, donde encontraron a tres de los fallecidos en sus camas y a uno en el baño. En la cocina se localizaron varias ollas quemadas sobre la estufa, cuyos contenidos estaban completamente calcinados.
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