La oposición centroderechista de Portugal ganó este domingo por estrecho margen las elecciones legislativas, en las que la extrema derecha habría duplicado sus resultados marcando un giro a la derecha del país tras ocho años de gobierno socialista, según los sondeos.
A tres meses de las elecciones europeas, estos comicios anticipados confirman que la extrema derecha está en auge en todo el continente, como ya se vio en Italia y Países Bajos.
Portugal, donde fueron llamados a las urnas 10,8 millones de votantes, era uno de los pocos países en Europa liderados por la izquierda cuando en noviembre el primer ministro saliente, Antonio Costa, dimitió tras ser citado en una investigación por tráfico de influencias.
Según un sondeo a pie de urna de la televisión pública RTP, la Alianza Democrática (AD) de centroderecha, liderada por Luis Montenegro, de 51 años, habría ganado las elecciones con entre un 29 y 33 % de los votos. Los resultados indican sin embargo que no podrá formar una mayoría por sí sola.
“Parece inevitable que la AD ganó las elecciones y que los socialistas perdieron”, declaró Montenegro ante sus simpatizantes en Lisboa.
Durante la campaña, Montenegro descartó formar gobierno con el apoyo de la extrema derecha. El político esperaba en cambio apoyarse sobre el pequeño partido Iniciativa Liberal, pero la formación habría obtenido entre un 5 y 7 % de los votos, según el mismo sondeo.
Con estos resultados, ambos partidos no alcanzarían el umbral de los 116 diputados necesarios para tener la mayoría absoluta. El Parlamento tiene 230 escaños.
El Partido Socialista (PS), que obtuvo la mayoría absoluta en las últimas legislativas de enero de 2022 con un 41,4% de los votos, llegaría esta vez en segunda posición con entre un 25 y 29% de los sufragios.
Tras la salida de Costa, el PS se agrupó en torno a Pedro Nuno Santos, exministro de 46 años del ala izquierda del partido.
Resultado “absolutamente histórico”
Del lado de los vencedores, el partido de extrema derecha Chega (Basta) saldría reforzado del escrutinio y habría obtenido entre un 14 y 17% de los votos, contra un 7,2% hace dos años.
El resultado lo mantiene como tercera fuerza política del país y confirma las encuestas preelectorales para este partido antisistema.
Chega fue creado en 2019 por André Ventura, un profesor de Derecho de 41 años, antaño comentarista de fútbol y conocido por sus ataques xenófobos contra la minoría gitana.
Es un “resultado absolutamente histórico”, celebró Ventura tras los sondeos a pie de urna. El político dijo que estaba “disponible” para ofrecer “un gobierno estable a Portugal” dentro de “una sólida mayoría de derechas”.
El auge de la extrema derecha en el país se produce cuando Portugal conmemora el próximo mes el 50 aniversario de la Revolución de los Claveles, que puso fin a la dictadura fascista y a 13 años de guerras coloniales.
Además de las sospechas de corrupción que llevaron a la dimisión de Antonio Costa, Ventura alertó durante la campaña del aumento de la inmigración en el país. La población extranjera en Portugal se duplicó en los últimos cinco años.
La tasa de abstención, estimada entre el 32% y el 38% por el sondeo de la RTP, sería la más baja desde 2005.
El balance del actual gobierno socialista se ha visto empañado por la inflación, pese a la consolidación de las finanzas públicas, el crecimiento por encima de la media europea y el bajo nivel de desempleo.
Portugal también ha sufrido problemas en los servicios de salud y las escuelas, así como una gran crisis inmobiliaria.
A esto se suman una serie de escándalos de corrupción, que terminaron haciendo caer a Antonio Costa, y el aumento de población migrante, dos de los temas electorales de la extrema derecha.
AFP